El surgimiento acelerado de nuevas herramientas y plataformas tecnológicas, además del avance de la Transformación Digital que la pandemia del coronavirus impulsó, ha transformado la infraestructura corporativa y ha dejado a los usuarios hiperconectados, lo cual está ayudando al aumento del volumen de conexiones e información que generan las empresas.
En este nuevo escenario, la seguridad y la privacidad de datos se han vuelto uno de los principales desafíos que las empresas deben enfrentar para adoptar las nuevas modalidades híbridas de trabajo, estar en conformidad y mantenerse competitiva en el mercado. Por lo tanto, para enfrentar esta situación, es necesario invertir más y más en soluciones de ciberseguridad y compliance.
La seguridad y la privacidad han levantado, además, otra discusión entre empresas de todo el mundo, sobre la implementación de legislaciones que buscan garantizar la seguridad de los datos, como la norma europea RGPD, lo cual aumenta aún más los obstáculos que enfrentan las empresas para adaptarse a las nuevas reglas.
Además, los ciberdelitos ahora son cada vez más frecuentes, exigiendo así que los emprendimientos refuercen sus sistemas y herramientas de protección para evitar cualquier tipo de violación de datos.
¿Sus clientes ya tienen un sistema de seguridad pensado para el futuro? ¡Descubra, a continuación, los nuevos desafíos que enfrentan las empresas para ayudarles a reforzar aún más esta estrategia!
Descubra, a continuación, los principales desafíos que enfrentan las empresas cuando se trata de mantener la seguridad y privacidad digital de los datos de sus usuarios:
Gracias a los avances del Internet de las Cosas, actualmente, es posible integrar objetos, dispositivos, sensores y otros elementos a la red, para enviar y recibir datos e incluso controlar las máquinas de manera remota.
Por ello, las empresas deben enfrentarse a cada vez más dispositivos y sensores conectados a la red corporativa, generando e intercambiando información y otros contenidos.
Aunque el IoT brinde incontables beneficios para el ambiente de trabajo, también puede representar una amenaza. En caso de que alguno de los dispositivos conectados sufra alguna falla, representa un serio riesgo a la seguridad y privacidad de los usuarios.
Las empresas que recolectan, almacenan, gestionan y procesan datos de usuarios, deben garantizar que sus funcionarios traten y manejen esa información de manera correcta y sigan todas las responsabilidades legales. Sin embargo, la mayoría de las corporaciones no ofrecen educación sobre ciberseguridad a sus trabajadores.
Por lo tanto, las organizaciones que no ofrecen la capacitación adecuada para sus colaboradores podrán sufrir graves problemas de fuga de datos y violación de la privacidad de la información de clientes y terceros, causando pérdidas financieras para los negocios.
Uno de los más grandes desafíos que enfrentan las empresas es hacer que todo su equipo interno se preocupe con la seguridad y privacidad digital. Por esto, es fundamental ofrecer capacitaciones, como dijimos anteriormente. Sin embargo, no es suficiente.
Es necesario que haya promotores internos para que los subordinados sigan el ejemplo y realicen sus tareas correctamente. La empresa debe implementar una cultura de ciberseguridad en la que todos entiendan sus responsabilidades y conozcan los riesgos de seguridad.
Otro gran desafío actual que enfrentan las empresas es la realización de un adecuado almacenamiento de los datos, contenidos internos sigilosos, información de clientes, aliados y de sus propios colaboradores, entre otros.
Para garantizar una seguridad y privacidad efectivas de cada tipo de contenido almacenado, es necesario realizar auditorías de todas las fuentes para analizar cuáles datos se recolectan, cómo se analizan y quién tendrá acceso a ellos.
Garantizar que todos los trabajadores sigan los cambios y nuevas regulaciones con respecto a la seguridad y privacidad de datos es un gran desafío.
El uso de información de terceros debe ser cada vez más transparente, por esto, las organizaciones tendrán que enfrentar nuevos procesos internos para garantizar que eso suceda.
Esto exigirá que las empresas inviertan en procesos de gobierno para garantizar que todas sus actividades internas se realicen correctamente y estén de conformidad con las nuevas reglas.
Como lo puede notar, los desafíos de las organizaciones son grandes, para que puedan proteger sus datos confidenciales y garantizar la conformidad con las complejas regulaciones actuales.
Por esto, es fundamental invertir en soluciones con aplicación de controles de seguridad y mecanismos de conformidad. Solamente será posible proteger los datos confidenciales con un efectivo monitoreo de acceso, abarcando los requisitos de conformidad de manera uniforme.