<img height="1" width="1" alt="" style="display:none" src="https://www.facebook.com/tr?ev=6016380644279&amp;cd[value]=0.00&amp;cd[currency]=USD&amp;noscript=1">
Header topo - Blog LAC
TD SYNNEX
  • Quiero conocer los cursos
  • Quiero conocer los cursos
  • Quiero conocer los cursos
  • Quiero conocer los cursos.

5G e Internet de las Cosas: ¿Qué relación hay entre ellos?

Publicado en 14-jun-2022 5:00:00

Al relacionar estas dos tendencias, las empresas se vuelven capaces de gestionar insights con base en análisis para optimizar los negocios. 

5G e Internet de las Cosas: ¿Qué relación hay entre ellos?

El avance de la Transformación Digital y la evolución de tecnologías como el Internet de las Cosas (IoT), la Inteligencia Artificial y el Big Data, además del aumento del uso de dispositivos móviles ha exigido un mayor desempeño del Internet. Sin embargo, la conexión con la web no ha alcanzado aún su potencial, pero tiende a hacerse cada vez más rápida para satisfacer esas nuevas demandas que están surgiendo a lo largo de los años, con la llegada del 5G. 

 

El Internet de las Cosas, que es cada vez más indispensable para las empresas, funciona solamente cuando hay conexión de los dispositivos con el Internet. Con base en ello, ya podemos imaginar la importancia del 5G para el avance del IoT en los próximos años. 

 

Al ser la primera red planeada para actuar con baja latencia y tiempo de respuesta 10 veces más corto que la red 4G, el 5G es la solución que promete conectar de forma más eficiente vehículos autónomos, refrigeradores inteligentes, edificios conectados, entre incontables posibilidades. 

 

El número de dispositivos IoT conectados crece aceleradamente todos los días en todo el mundo y las redes tradicionales ya no son suficientes para transmitir la grande cantidad de datos que se están generando a todo momento. Por esto, el 5G surge como una solución capaz de absorber estas conexiones simultáneas, de forma eficiente y con menor consumo de energía. Es una red programada para dar respuesta en tiempo real, además de ser escalable y versátil. 

 

El 4G fue una evolución del 3G, con una banda más ancha y mayor velocidad, pero con el mismo ecosistema, por otro lado, el 5G tiene una nueva programación, la cual pretende habilitar toda una serie de usos que salen de este ecosistema. 

 

La red 5G tiene latencia de, máximo, 1 milisegundo, lo cual hace que se conecten incontables dispositivos a la red y se desconecten cuando no estén en funcionamiento. 

 

 

De esta forma, la nueva red puede responder a necesidades críticas que necesitan tiempos de respuesta sumamente cortos. Por ejemplo, un vehículo autónomo, actualmente, desde el momento en el que recibe la indicación de frenar, necesita tres metros para parar, justamente por el tiempo de respuesta del 4G. Con el 5G, esa distancia de freno serían centímetros.    

 

El aumento de la demanda del 5G transformará la orientación de las inversiones de los operadores de telecomunicaciones, las cuales hoy se enfocan en atender la comunicación entre las personas. El Internet de las Cosas abre un nuevo mercado en el que los operadores tienen grandes oportunidades de aumentar sus ingresos. 

 

El mercado le apuesta, con seguridad, a que el número de dispositivos conectados al IoT será más alto que la cantidad de smartphones, por lo que la necesidad de contratación de una nueva red será aún mayor. 

 

La ITU, Unión Internacional de Telecomunicaciones, ha venido definiendo parámetros para el 5G, con base en las redes anteriores y las necesidades futuras. Uno de los puntos que defienden es que la planeación de espectro es la clave para el éxito del 5G. Para esta asociación, las bandas de espectro móvil por debajo de los 6 GHz serán importantes para la integración entre el 4G y el 5G, mientras que las bandas anteriores ofrecen desafíos técnicos, al ser posible desarrollar servicios móviles en bandas más altas con nuevas soluciones de radio. 

 

Para ellos, es necesario aprovechar todas las fuentes de espectro, desde la licenciada, la no licenciada hasta las compartidas, puesto que los órganos reguladores y políticos necesitan garantizar inversiones en todas las áreas del ecosistema para incentivar una sociedad conectada. 

 

Los especialistas creen que una estandarización permitirá que la red esté efectivamente en funcionamiento en los próximos años. En resumen, la red 5G tendrá que aumentar la velocidad del Internet, pero, antes que nada, llegará para organizar la convivencia entre los smartphones y millones de objetos conectados, como carros y casas inteligentes, además de ayudar en el desarrollo de ciudades inteligentes y eficientes. 



Categorias: Internet de las Cosas