Entiende los aspectos por detrás de cada una de ellas y la forma como Cloud Computing puede mejorar el ambiente corporativo.
Cloud computing es un modelo de negocio muy interesante y ha sido identificado como la tendencia más lucrativa para el mercado de la tecnología en los próximos años. La adopción de plataformas y aplicaciones en la nube, ya sea el uso corporativo o personal, está creciendo a un ritmo rápido, animado por la aparente facilidad de implementación.
Nube Pública
Cloud Computing se enfoca principalmente en las nubes públicas, porque agregan un mayor número de usuarios. Sin embargo, la posibilidad de canalizar los recursos de virtualización y automatización de los servidores y data centers hacia la creación nubes privadas también existe. Esta opción es considerada por empresas que desean mantener seguros los datos almacenados y compartidos internamente y que generalmente ya cuentan con un departamento de computación en funcionamiento.
Nube Privada
La nube privada usa todos los procesos básicos de la computación en nube: virtualización, estandarización, automatización y self-service (autoservicio), para proporcionar acceso exclusivo tan solo a los servidores y data centers de la empresa. En otras palabras, la escalabilidad está limitada a la capacidad de TI de dicha empresa. De esta forma, es posible disminuir el tiempo de despliegue de nuevos sistemas y aplicaciones, lo que aporta varios beneficios. La respuesta a una demanda que puede tardar semanas ahora es posible en horas o minutos. En este sentido, los beneficios obtenidos por concretizar oportunidades para lanzar nuevos negocios son enormes, y los recursos computacionales de la empresa se aprovecharán con más calidad. Esta escalabilidad no sólo aumenta la productividad de la empresa, sino que también ayuda a reducir costos.
Los costos en una nube privada son Capital Expenditure (CAPEX) [Inversión en Bienes de Capital], mientras que, en una empresa que utiliza la nube pública, se trabaja con costos que son Operating Expenses (OPEX) [Gastos Operativos]. Con excepción de esta diferencia de costos entre estos dos modelos de nube, el valor generado por cada una de ellas es básicamente el mismo. Esto significa que una Nube Pública destina sus inversiones a recursos de operaciones y aplicaciones. En contraste, la Nube Privada ofrece inversiones en infraestructura y plataforma para que gradualmente disminuyan los costos operativos y aumenta la productividad.
Sin embargo, lo que despierta un gran interés cuando se hable de Nubes Privadas es la cuestión de la seguridad y privacidad o protección de los datos prioritarios de la empresa. En este modelo de nube los niveles de confiabilidad aumentan, ya que los servidores y data centers operan exclusivamente en el ambiente corporativo, lo que garantiza la confidencialidad de los datos relacionados a la empresa y sus clientes.
Existen algunas desventajas cuando hablamos de una Nube Privada: baja elasticidad, alto grado de sofisticación en términos de dimensionamiento y capacidad, así como costos de CAPEX más elevados. Esto hace que las nubes privadas no sean la mejor opción para todos los tipos de empresas. Los costos más elevados de CAPEX a corto y largo plazo tornan la inversión recomendable sólo para empresas que ya poseen un mayor volumen de capital para innovación en tecnología.
Nube Híbrida
Es aquí que las nubes híbridas presentan el mayor potencial para proporcionar soluciones equilibradas, ya que son la mejor opción para resolver las cuestiones de elasticidad, costos y gestión. Aunque se centren en pequeñas y medianas empresas, se pueden utilizar también en empresas de gran envergadura. Todo depende de las necesidades de cada empresa.
Las nubes híbridas se pueden crear de diversas formas. Pueden ser una mezcla de recursos físicos y virtuales, de contrataciones de software como servicio (SaaS), redes privadas y públicas, o de diversos proveedores. Por ejemplo, una empresa puede combinar su infraestructura interna con nubes externas de un proveedor de nube y por otro lado, las nubes privadas totalmente establecidas en proveedores de nubes en combinación con nubes públicas.
Sin embargo, la adopción de dicho modelo de negocios no es tan sencilla como pudiera parecer. La empresa tiene que tener un departamento de tecnología que esté al corriente de todas las necesidades de TI de la misma. Con un departamento bien integrado a la empresa es posible identificar las áreas que requieren virtualización para acelerar sus procesos con miras a aumentar la productividad y generar nuevos negocios, así como las áreas que deben pasar por pruebas antes del despliegue del modelo de Cloud Computing.
El enfoque híbrido es el camino más indicado para equilibrar los riesgos y beneficios de las nubes públicas y privadas. Es la mejor forma que tienen los CIOs (directores de informática) de aprovechar los beneficios de las dos nubes, pues al ampliar los servicios utilizados a través de una nube híbrida es posible aumentar la eficiencia de todos los aspectos del negocio de la empresa en un ambiente Cloud.
Fuentes:
http://www.dualtec.com.br/blog/2013/01/29/o-futuro-da-nuvem-e-hibrido/
http://protocoloti.blogspot.com.br/2012/03/cloud-computing-publica-privada-e.html
http://www.dualtec.com.br/blog/2013/01/29/o-futuro-da-nuvem-e-hibrido/
http://computerworld.uol.com.br/especiais/2012/07/20/salesforce-nao-acredita-em-nuvens-privada-e-hibrida/