Los deseos y las necesidades de los consumidores se han ido modificando en los últimos años. Descubra cómo la digitalización del comercio minorista es necesaria para satisfacer esas nuevas demandas.
La sociedad está cada vez más conectada, lo cual ha hecho que surjan nuevos perfiles de clientes. Aún más exigentes, esos nuevos consumidores se volvieron digitales y siempre buscan la mejor experiencia y atención al hacer sus compras.
Por esto, las empresas de todos los sectores deben estar preparadas para satisfacer dichas nuevas demandas y, con el comercio minorista, esto no es diferente. De esta forma, invertir en tecnología es indispensable.
Además, en los últimos dos años, fue necesario invertir más y más en la Transformación Digital de los negocios, dado que la pandemia del coronavirus impulsó el comercio digital y, en consecuencia, intensificó las ventas del comercio minorista.
Incluso, de acuerdo con datos de eMarketer, con el distanciamiento social en la pandemia, los minoristas y consumidores rápidamente se cambiaron al comercio electrónico. Esta migración hizo que las ventas se dispararan en un 63,3% y sobrepasan la marca de los 100 mil millones de dólares por primera vez en países latinos.
La investigación también muestra que en el 2020, 38 millones de consumidores en Latinoamérica compraron online por primera vez. Este año, casi la mitad de la población de esta región hará una compra en una plataforma digital.
Por esto, los modelos de negocios minoristas tuvieron que adaptarse para poder seguir el ritmo del mercado, cada vez más competitivo, y enfrentar este universo multicanal. Para seguirle el paso a esa transformación, las empresas tuvieron que entender cómo se comportan sus clientes y buscar nuevas e innovadoras tecnologías para mejorar su desempeño y optimizar sus productos, utilizando los canales digitales para lograr satisfacer las nuevas necesidades de los usuarios.
Para esto, la tecnología se vuelve la principal aliada, ayudando a las empresas a ser más atrayentes por medio del uso de soluciones interactivas, proporcionando una gran mejora en la experiencia de la compra.
Lea este material para entender mejor la importancia de la tecnología para el comercio minorista e invierta ahora mismo en las soluciones correctas para su negocio. ¡Disfrute su lectura!
Comercio minorista omnichannel: ¿qué es eso?
Antes que nada, cuando hablamos de digitalización del comercio minorista, tenemos que acudir al término omnichannel. Es esencial para que este sector logre, realmente, modernizarse.
Omnichannel no es nada más que una práctica basada en la estrategia de hacer que todos los canales utilizados por una empresa puedan confluir en un solo lenguaje, minimizando tanto como sea posible las diferencias entre el mundo online y offline.
A pesar de no ser exactamente una novedad en el comercio minorista, la tendencia omnichannel empezó a consolidarse con más intensidad, a partir del momento en que los minoristas notaron el cambio en los hábitos de los consumidores, influenciados por el uso intensificado del Internet y de las compran online.
Al incluir tecnologías que le permitan a la empresa volver su negocio omnichannel, es posible que las empresas de este sector trabajen enfocadas totalmente en la experiencia de los consumidores. De esta forma, pueden poner a disposición todos sus canales para que los clientes satisfagan sus necesidades cuando y donde quieran.
Además, al utilizar software para apoyar la integración de los canales de ventas, los minoristas ahora pueden conseguir una cantidad de información valiosa sobre el comportamiento de su público, lo cual ayudará en las próximas ventas.
¿Cuál es la importancia de la tecnología en el comercio minorista?
Cuando una empresa minorista entra en el mundo digital, la inversión en tecnología es esencial. En términos de estructura, es necesario poner a disposición nuevos recursos para atraer y fidelizar a los nuevos clientes, además de tener mucha cautela con las cuestiones comerciales, logísticas, contables, fiscales, entre otras.
Asimismo, es posible contar con otros beneficios, de la tecnología en el comercio minorista, tales como:
• Personalización y humanización de la atención: por medio de la tecnología de chatbots, es posible mostrar que el minorista sabe exactamente qué necesita su cliente y cuándo lo necesita. De esa manera, la atención automática por robots ahora es más sofisticada y humanizada.
• La automatización de procesos internos: con software modernos, es posible automatizar procesos y generar ahorro de tiempo del equipo, así como reducir desperdicios financieros.
• Aumento de la productividad: al contar con los dispositivos y sistemas adecuados, ya sea para canal de atención, consulta de precios, cambios y devoluciones o formas de pago, la empresa logrará agilizar procesos y elevar la satisfacción y el número de ventas.
• Seguridad de la información: otra gran ventaja de invertir en tecnología en el comercio minorista es el refuerzo de la ciberseguridad de los datos que circulan diariamente en las empresas. Es posible contratar software robustos e innovadores para impedir que los criminales violen los sistemas corporativos y secuestren datos de los clientes.
Como puede ver, la tecnología y la digitalización de los negocios proporcionan muchas ventajas para las empresas de comercio minorista. Por ello, es fundamental invertir para continuar destacándose en el mercado.
Sin embargo, independientemente de las iniciativas adoptadas por los minoristas, es necesario entender la importancia de ofrecer una mejor experiencia para los clientes y ser capaz de fidelizarlos. Es por esto que el enfoque principal de las empresas debe ser poner a sus consumidores en el centro de sus estrategias digitales.
