La tecnología en la escuela representa transformación del proceso educativo.
Todos los sectores que utilizan tecnología en sus procesos se benefician de alguna forma, resolviendo cuestiones que antes llevaban tiempo para ser solucionadas de forma manual o en que el conocimiento quedaba restringido a un grupo pequeño de personas.
En la educación no es diferente. Hoy, con tantas posibilidades de herramientas colaborativas, es posible conectar aulas por videoconferencia, encontrar profesores, educadores con otras experiencias, ampliar la visión del mundo de los alumnos y posibilitar innumerables discusiones, antes restringidas solamente a los libros y al pizarrón.
La tecnología en la escuela inicia una serie de transformaciones en el proceso educativo. La primera de ellas es la función del profesor, que se convierte a su vez, en un facilitador entre los contenidos. Si antes el maestro retenía todo el conocimiento, hoy, con las herramientas de búsqueda, aplicaciones, tutoriales y videos disponibles, todo el conocimiento puede ser explotado. Otra de las transformaciones observadas está en el proceso de aprendizaje, que se vuelve colaborativo; los alumnos aprenden de forma participativa, algunas veces también enseñando.
Los profesores obtienen acceso a contenidos, nuevas visiones sobre asuntos que ya trabajan en el aula, nuevas herramientas y materiales para trabajar. Así, el equipo de gestión de la escuela obtiene entonces acceso a las plataformas de servicios administrados para mejorar sus controles en el día a día.
En el ambiente escolar se posibilita la creación de un grupo multidisciplinario de profesores, así como multiculturales, independientemente de la localización geográfica en que se encuentran en ese momento. El impacto en toda la comunidad es grande, una vez que nuevas experiencias en diferentes ambientes pueden ser llevadas a discusión.
Cisco realizó un estudio llamado Programa Escuela de Conectividad para el Siglo XXI, basado en la experiencia de cinco países que consiguieron conectar todas sus escuelas con banda ancha de alta velocidad: Irlanda, Portugal, Nueva Zelanda, Uruguay y Estados Unidos.
En esos países, se verificó que las escuelas alcanzaron varios cambios significativos, teniendo acceso a mejores y más amplios materiales educativos, alternativas de profesores más preparados para discutir determinado tema, entre otros beneficios.
La empresa hizo un reporte con algunas recomendaciones que apuntan que es posible transformar la educación en cinco años.
- Debe haber un compromiso público con la transformación de la educación por medio de la conectividad en las escuela.
- Autoridades y gestores municipales, estatales y federales deben estar convencidos y entender la importancia de proyectos como este, para que puedan apoyar con leyes e incentivar fuentes, tanto públicas o privadas, de financiamiento para la implementación necesaria.
- Es necesario tener un plan de acción con metas, plazos y procesos, contando con objetivos medibles.
- Es necesario tener mecanismos de seguimiento y verificación de los proyectos para buscar soluciones y resolver lagunas de implementación.
Los profesores deben recibir capacitación, con contenido apropiado, técnicas para utilizar los equipos, y poder integrar una buena enseñanza en aula y el correcto manejo de las máquinas.
Uno de los puntos más importantes destacados por Cisco, es que sirve de poco que la escuela esté conectada si las personas no saben usar toda la tecnología a favor de la educación.
Las herramientas son fundamentales
Las herramientas de colaboración desempeñan un papel crucial para la comunicación eficaz durante todo el proceso educativo.
Además de plataformas de video eficientes, que sean capaces de transmitir audio e imagen de forma clara, ofreciendo mejores experiencias para los usuarios, es necesario tener una plataforma para recibir archivos, materiales y hacer anotaciones.
Traducir, escribir, diseñar ideas y después compartir con amigos de la sala, escuela, o de la ciudad, ya que estamos hablando de aprendizaje en equipo, comunicación en conjunto, trabajo colaborativo.
Para que estas aplicaciones estén en perfecto funcionamiento, una escuela realmente conectada debe incluir la velocidad de Internet, la extensión de su red local (LAN), la conexión de una red WAN con otros centros educativos, la distribución de ruteadores WI-Fi en los espacios públicos, o servidores e instalaciones, además de toda la cuestión de seguridad, BYOD y filtro de seguridad que cualquier red debe tener.
Así, a partir del esfuerzo de diferentes agentes políticos, profesores, coordinadores y alumnos, es posible transformar y optimizar los procesos de enseñanza- aprendizaje en el aula por medio del uso de tecnologías adecuadas.
Fuentes:
http://www.cisco.com/c/m/es_mx/offers/conectividad_escuelas/index.html
https://americas.thecisconetwork.com/site/content/lang/es/id/7491
http://www.connectmedia.com.br/index.php?pagina=publicacao.php&idpublicacao=1102