¿Cómo proteger sus equipos contra los cortes de energía?

Anomalías en el funcionamiento de la red de energía eléctrica pueden dañar o inclusive inutilizar dispositivos electrónicos.

Proteger equipos eléctricos de las variaciones de la energía no es una tarea fácil, principalmente en los meses de verano, donde las altas temperaturas demandan un mayor consumo de los equipos, como el aire acondicionado. Todo esto hace que sean muy comunes las oscilaciones en las redes corporativas e inclusive las interrupciones en el abastecimiento de electricidad.

Si en otras estaciones la preocupación con estos eventos parece menos evidente, ya que son más comunes en caso de desastres climáticos, como tempestades y huracanes, en el verano las anomalías en las redes no son meras inconveniencias pues pueden quemar equipamientos y dispositivos, y en el caso de empresas, la interrupción o altibajos de energía pueden ocasionar perdidas de datos en computadores y servidores, principalmente si el corte de energía se prolonga.

Si el problema es serio y recurrente, ¿qué es lo que se puede hacer para minimizar esos impactos?

Sepa que solamente la utilización de un estabilizador no le evitará el problema, no importa la época del año. Por lo tanto, una primera defensa contra los cortes, altibajos y apagones de energía es tener un sistema de alimentación ininterrumpida (UPS), lo que garantiza el abastecimiento de forma continua, por si de repente ocurre alguno de los eventos mencionados.

No obstante, es necesario que se esté atento a que diferentes organizaciones exigen diferentes tipos de dispositivos de energía. Todo depende de un breve estudio que revele un diagnóstico de los requisitos de energía y que se escoja la opción adecuada entre los tipos de UPS disponibles en el mercado. Para mencionar un ejemplo de la importancia de un diagnóstico, hardware diferentes pueden necesitar dispositivos específicos de protección de energía, entonces es una solución que debe evaluarse para que la mejor opción sea la que realmente va ayudar a la empresa. Un primer buen paso sería determinar la necesidad de energía.

Generalmente los computadores y demás electrónicos se programan para que trabajen de forma eficiente de 90 a 110% de su necesidad de entradas nominales. Eso quiere decir que los equipos clasificados como 110 volts pueden trabajar en tenciones con intervalos que varíen entre 108 a 132 volts. Si sucede alguna anomalía en la red que cambie ese valor para abajo, algunos sistemas UPS pueden accionar baterías para mantener la carga dentro de los estándares establecidos para el funcionamiento operacional de los dispositivos. Al identificar que el abastecimiento de la red eléctrica se normalizó, el sistema UPS vuelve a la salida de energía de la red. Si ocurre una discontinuidad en el abastecimiento, como una interrupción, el sistema UPS proveerá la energía suficiente para que los usuarios puedan apagar sus equipos con seguridad, lo que evita pérdidas de datos y daños a los equipos.

Por lo tanto, su diagnóstico de administración de energía debe considerar los siguientes ítems:

- Capacidad: revela cuánta energía un sistema UPS abastece. De esa forma, en la medida en que la capacidad del sistema aumenta, más tiempo pueden permanecer prendidos los equipamientos. Especialistas indican que para que se calcule la capacidad necesaria de un UPS se debe sumar el consumo máximo de energía total de todos los equipamientos y dispositivos que se planean conectar a la red y al UPS. Esa cantidad de carga es la capacidad mínima que el sistema debe tener.

- Tiempo de ejecución: es el tiempo que un sistema UPS puede soportar una determinada carga y abastecer la energía suficiente para que los dispositivos conectados puedan desconectarse de forma correcta, sin daños a los equipos o pérdida de datos. Lo anterior puede tardar segundos o varios minutos, por ejemplo, si un usuario de un computador está conectado necesitará tiempo para guardar los documentos abiertos y cerrar las aplicaciones. Si hay más de un dispositivo conectado, aquel que tome más tiempo para cerrarse determinará el tiempo de ejecución mínimo. Para continuar utilizando el equipamiento durante interrupciones más largas, los usuarios necesitan una fuente de energía separada, como un generador.

Después de identificar cual es la demanda de energía de su empresa, se puede escoger entre los sistemas UPS disponibles, los cuales generalmente son de tres tipos: de espera, línea interactiva y de doble conversión. Cada uno tiene sus propias ventajas y niveles de protección, en algunos casos puede optarse por una combinación de las tres modalidades para proteger de forma eficaz sus equipamientos y datos de esas interferencias en el abastecimiento de energía.

Fuentes:

http://blog.shi.com/2016/07/18/keeping-equipment-safe-power-outages/#.V40b81QrKUk

http://www.techtudo.com.br/noticias/noticia/2015/11/como-proteger-seus-eletronicos-contra-quedas-e-oscilacoes-de-energia.html