Para una protección eficaz de estos entornos, se necesita tomar algunas medidas durante la migración. ¡Observa cuáles son!
La migración a entornos Hybrid Multi-Cloud ha sido una estrategia esencial para las empresas que buscan invertir en la transformación digital de sus negocios y mantenerse al día con el competitivo mercado actual.
La misma ofrece beneficios de costo y eficiencia, pero también hace que el proceso de gestión sea más complejo, exigiendo más atención y recursos de personal. Esta complejidad es el resultado de que cada nube tenga su propios sistemas y configuración en silos.
Además, al haber cada vez más aplicaciones basadas en la nube, las empresas deben enfrentar nuevos riesgos de seguridad que requieren conocimientos que suelen hacer falta, lo que puede retardar la implementación y el mantenimiento de una estrategia basada en múltiples nubes.
Teniéndolo en cuenta, preparamos este material con importantes consejos para que sus clientes puedan tener garantía de seguridad en su infraestructura y aplicaciones en esta era de Hybrid Multi-Cloud. ¡Obsérvalo!
¿Qué ha cambiado en la seguridad de la infraestructura y las aplicaciones en múltiples nubes?
Con la adopción de servicios en la nube por parte de diferentes proveedores, el perímetro de seguridad ya no es tan solo la red local, ahora se extiende a una multitud de aplicaciones en la nube utilizadas para cargas de trabajo fundamentales para los negocios.
Por eso las empresas deben estar preparadas para tratar con funcionarios que esperan poder colaborar y tener acceso a recursos en cualquier lugar, en cualquier momento, utilizando todo tipo de dispositivos.
En esta nueva realidad, es posible que las cargas de trabajo en una nube no sean visibles para los profesionales de operaciones de TI que tienen la tarea de proteger las cargas de trabajo en otra, lo que facilita las cosas a los ciberdelincuentes.
Esto se debe a que los entornos con varias nubes les proporcionan a los piratas informáticos una mayor superficie de ataque, especialmente cuando la empresa utiliza varias nubes públicas.
Así, cuanto más aplicaciones una empresa tenga ejecutándose en la nube, es más probable que ocurra un incidente de configuración incorrecta o de exposición de datos.
Por lo tanto, es preciso invertir en un enfoque con visibilidad y administración centralizados para garantizar la protección y el cumplimiento normativo de todas las aplicaciones simultáneamente en múltiples entornos.
La seguridad en Multicloud es una responsabilidad compartida
La seguridad de Cloud Computing es una responsabilidad compartida entre el proveedor de la nube y sus clientes. Básicamente existen tres categorías de responsabilidades en el Modelo de Responsabilidad Compartida: hay algunas responsabilidades que siempre son del proveedor, otras que siempre son del cliente y otras que varían según el modelo de servicio utilizado, como SaaS, PaaS e IaaS.
Las responsabilidades que siempre recaen en el proveedor son la protección de la propia infraestructura, y el acceso, parcheo y configuración de los hosts físicos y la red física en la que se ejecutan las instancias de computación y donde se alojan el almacenamiento y otros recursos.
Las responsabilidades del cliente ahora incluyen la gestión de usuarios y sus privilegios de acceso para evitar el acceso no autorizado, cifrar y proteger los activos de datos basados en la nube, así como gestionar el cumplimiento normativo.
Por lo tanto, para que las empresas puedan cumplir todas sus obligaciones, es fundamental contar con una solución nativa en la nube que sea capaz de ofrecer visibilidad centralizada y control granular basado en políticas.
¿Cómo garantizar la seguridad de la infraestructura y las aplicaciones en múltiples nubes?
Para una protección efectiva de aplicaciones en múltiples nubes, las empresas necesitan ajustar los procesos de implementación y garantizar que las políticas de seguridad y acceso a la red estén estandarizadas y se apliquen en todas las nubes.
Además, es necesario implementar algunas medidas, como:
Tener una política común de red y de seguridad.
Uno de los principales desafíos para las implementaciones de múltiples nubes es que generalmente los proveedores de la nube tienen arquitecturas propietarias diferentes construidas en estructuras, interfaces de programación de aplicaciones (APIs) y kits de herramientas específicos para su entorno.
Por lo tanto, una solución Hybrid Multi-Cloud eficaz debe proporcionar una red común y una estructura de seguridad que pueda abarcar todas las nubes utilizadas de forma continua.
Esto requiere abstraer la funcionalidad nativa de la nube con APIs, centralizar la administración, configurar y orquestar políticas y luego administrar de forma dinámica las conexiones entre nubes mediante la automatización.
Adopta la gestión de identidades y accesos (IAM) granular, basada en políticas y controles de autenticación en infraestructuras complejas
Por medio de la solución adecuada, las empresas solamente pueden otorgar los privilegios de acceso mínimos a activos y APIs que son esenciales para que un grupo o función realice sus tareas.
Por lo tanto, además de que cada usuario acceda sólo a lo necesario para su función, es posible requerir niveles más altos de autenticación para los que cuenten con privilegios mayores.
Comprender el concepto de modelos de responsabilidad compartida.
Además de que la visibilidad y la administración centralizada sean la prioridad, la empresa debe considerar el concepto de responsabilidad compartida desde el comienzo de su proceso de migración de aplicaciones a múltiples nubes.
Determinar cuáles serán los trabajos del proveedor de servicios y qué se destinará a la TI interna ayudará a los equipos a planificar mejor.
Es fundamental recordar que el proveedor es responsable por proteger la nube en sí, pero la empresa debe proteger todas las aplicaciones colocadas en la nube.
Por lo tanto, debe asegurarse de que sus cargas de trabajo estén protegidas, los datos cumplan con las normas y el control de acceso se administre correctamente.
Utilice un firewall de aplicaciones web de próxima generación (WAF)
El WAF es capaz de inspeccionar y controlar el tráfico de servidores de aplicaciones web. Se trata de un tipo de firewall diseñado para combatir amenazas que están más allá de las capacidades de los firewalls tradicionales.
El Firewall de Aplicaciones Web se diferencia por proteger a las aplicaciones web internas de ataques externos sofisticados en la capa de la aplicación. Para hacerlo, crea una barrera entre su servicio basado en la web y todo lo demás en Internet, bloqueando y protegiendo las aplicaciones de acciones criminales.
Priorice el control de acceso y la gobernanza de la nube
La gobernanza de la nube es la gestión de personas, procesos y otras acciones vinculadas a las políticas y estándares de los entornos con varias nubes.
Esto requiere tener equipos de gestión centralizados en varias nubes para evitar fallas en el control de acceso. Además, debe tenerse en cuenta el control de configuraciones e implementación y las políticas de seguridad entre las nubes.
Por eso, las empresas deben pensar en priorizar la automatización de la gobernanza a otras iniciativas como la optimización de gastos o el uso de tecnología de contenedores.
Aumente la visibilidad de la carga de trabajo y la aplicación en todas las implementaciones
La visibilidad es una parte clave del desarrollo de una estrategia de múltiples nubes híbridas exitosa. Y aunque algunos proveedores de nube ofrecen herramientas de visibilidad de red, muchos de ellos no son realmente efectivos en ecosistemas de múltiples nubes.
Por lo tanto, la empresa debe asegurarse de que cada carga de trabajo esté protegida, que ninguna integración exponga información sensible y que las aplicaciones permanezcan disponibles para los usuarios.
Una forma de lograrlo es invirtiendo en plataformas de administración de nubes diseñadas específicamente para administrar múltiples nubes. Pueden administrar y monitorear cualquier activo.
Además, pueden consolidar la información en una fuente central y proporcionar un panel único para garantizar la visibilidad de la protección de la carga de trabajo, los componentes y el cumplimiento normativo.
Los entornos de múltiples nubes llegaron para quedarse. Sin embargo, sin soluciones y estrategias adecuadas, pueden presentar riesgos para los que muchas empresas no están preparadas.
Es por eso que las empresas necesitan actualizar e invertir en soluciones ideales para esta nueva realidad. Solo así será posible garantizar la protección de su infraestructura y aplicaciones desde el inicio de la migración a Hybrid Multi-Cloud