El aumento de la productividad para generar mayor utilidad. Esa es la premisa de cualquier empresa, independientemente del tamaño, sector o localidad. En los tiempos actuales, la productividad está directamente relacionada con las tecnologías de la información.
El depender de las computadoras y sus comandos, hacen que las empresas inviertan cada vez más en herramientas que puedan facilitar el día a día de los empleados, aprovechando mejor el tiempo que dedican a un cierto trabajo para pensar en soluciones estratégicas dirigidas al negocio.
Con tantas opciones de productos y aplicaciones que existen en el mercado, es difícil pensar que una empresa competitiva tenga reportes de controles financieros, por ejemplo en cuadernos o en plantillas sencillas de Excel.
Las TICs reducen el tiempo y los costos de producción además de agilizar el tiempo de respuesta en el mercado, facilitando la toma de decisiones por parte de los gestores. En tanto, esa inversión en tecnología se reduce entre las micro y pequeñas empresas, siendo uno de los factores que la entorpecen, la falta de conocimiento de los productos y servicios, además de todos los beneficios que ellos pueden llevar directamente a los negocios.
Los principales sistemas que una empresa necesita tener son; los administrativos, los operacionales y los de contabilidad financiera. Es un buen comienzo para los que pretenden iniciar investigaciones entre los abastecedores.
ERP- Enterprise Resource Planning o Planeación de los Recursos de la Empresa, es una plataforma de software desarrollada para integrar a los departamentos, posibilitando la automatización y almacenamiento de toda la información de la empresa.
La estructura es desarrollada en módulos que permiten ser personalizados en función de las particularidades de cada empresa. Estos módulos son integrados y se entienden entre sí, permitiendo al administrador observar toda la operación.
La personalización del sistema es lo que crea la competitividad entre los abastecedores de tecnología, y el empresario puede beneficiarse al momento de la negociación. Además del costo, claro, lo importante es negociar el plazo de entrega e instalación, las funcionalidades que el sistema permitirá, los reportes que serán posibles generar, además del mantenimiento, acompañamiento de la instalación y entrenamiento del personal para utilizar la nueva tecnología.
Los beneficios del ERP son el flujo único, continuo y constante, además de la exclusión de varios sistemas que funcionaban de forma aislada, con información reducida y algunas veces desconectadas. La integración de la información financiera, la centralización de los pedidos de los clientes, la reducción de errores, la reorganización de los procesos y facilidades de planeación, son otros factores que potencializan la contratación de este sistema.
El 99.8% de las empresas en México, son de pequeño o mediano nivel. Representan cerca del 52% del PIB y generan el 72% de los empleos del país. Por ello, apenas el 6% de ellas utilizan TI avanzada para respaldarse.
De acuerdo con la Encuesta Nacional sobre Productividad y Competitividad de miPyMEs, el 90% de las pequeñas y medianas empresas tienen acceso a Internet. Entre las microempresas, el índice cae a un 27%, siendo que el principal motivo de las que no están utilizando estas tecnologías, se debe a la creencia de que no las necesitan. Además de eso, el 17% de los microempresarios dijeron que no tienen acceso a los equipos y el 11.8% porque no sabrían cómo utilizarla.
En México todavía siguen creciendo las inversiones en TI para las empresas de pequeño nivel en Latinoamérica. Los empresarios comienzan a observar los beneficios que pueden ser llevados al negocio, especialmente en la innovación de los procesos y expansión para otros mercados.
La confianza de los empresarios es grande, ya que el 48% de ellos confían en que tendrán un crecimiento de por lo menos 6% al año, durante los próximos 3 años.
Fuentes:
http://www.liderempresarial.com/negocios/lo-que-necesitas-saber-de-las-mipymes-mexicanas/