La necesidad del distanciamiento social, impuesta por el nuevo coronavirus para evitar una propagación descontrolada de la enfermedad, nos obligó a paralizar las actividades comerciales, de manera general, causando grandes cambios en el escenario corporativo.
El modelo de negocio conocido por las empresas está bajo amenaza, lo cual obliga a los gerentes a adoptar enfoques estratégicos y sistemáticos de emergencia para fortalecer la resiliencia de los modelos actuales y asegurar la continuidad de los negocios durante la pandemia.
A medida que las empresas navegan en la crisis que vivimos, hay una serie de asuntos que los líderes empresariales deben tener en cuenta, tanto en relación con las reacciones organizacionales frente a los impactos sociales, como con las reformulaciones estratégicas para mantener sus negocios y desarrollar planes de recuperación.
Lea el post y conozca los 5 pasos para mantener la resiliencia de los negocios durante la crisis. ¡Disfrute su lectura!
Al margen de la situación, los líderes deben estar listos para proteger su fuerza de trabajo y mantener a la empresa lo más estable posible.
Frente a la pandemia de el COVID-19, los CIO desempeñan un papel fundamental en ese proceso de protección y preservación, porque estimulan la inversión en las mejores tecnologías de gestión remota y recursos digitales.
En otras palabras, habilitan herramientas esenciales para el trabajo en casa, crean un espacio de trabajo virtual adecuado, desarrollan estrategias de protección remota de datos, entre otras áreas, para mantener la agilidad, seguridad y calidad de los servicios.
Y, de esta manera, preservar la resiliencia del modelo de negocios actual, garantizando operaciones continuas durante la crisis.
Descubra, a continuación, los 5 pasos para mantener la resiliencia de los negocios durante la crisis.
El primero y, tal vez, el más importante de los cinco pasos para mantener la resiliencia de los negocios durante la crisis es crear una cultura organizacional resiliente.
La calma, la confianza, la compostura y la compasión son importantes en situaciones fuera de lo común, porque permiten que la toma de decisiones se haga de forma más responsable y justa. Frente a los cambios impuestos por la pandemia, esas emociones deben ser regla en la empresa.
Además, para operar de forma colaborativa y asegurar la calidad de las operaciones remotas, es fundamental cuidar del bienestar físico y mental de la fuerza de trabajo. Sólo así, con condiciones técnicas apropiadas y una relación transparente, el equipo podrá invertir su talento en estrategias de preservación y recuperación.
La evaluación de la liquidez a corto plazo también es uno de los cinco pasos para mantener la resiliencia de los negocios. Tal estudio permite prever presiones en el flujo de caja e intervenir de forma adecuada, evitando riesgos y problemas más serios. Adoptar herramientas digitales puede facilitar el proceso.
Así como se realizará el monitoreo de vulnerabilidades financieras internas, también se identificarán vulnerabilidades que involucran a los clientes, proveedores y aliados. Por esto, es importante que el equipo de TI sea creativo para intervenir en este ciclo, facilitando la interacción de los administradores.
La tecnología y la cultura resiliente pueden facilitar el trabajo remoto. Sin embargo, la flexibilidad con la que esa nueva rutina se implementará, marcará una gran diferencia.
En especial durante la crisis, los modelos de trabajo ágiles son esenciales para este proceso, puesto que permiten que los colaboradores accedan a diversos datos y se conecten a sistemas específicos siempre y donde sea necesario. El equipo de TI debe estar atento a esas necesidades.
El cuarto de los cinco pasos para mantener la resiliencia de los negocios durante la crisis es la unión del trabajo humano y la automatización de las máquinas. Tal también es un aspecto importante de una cultura resiliente, porque combina las mejores competencias de cada uno de los recursos que componen el sistema organizacional.
El uso de la inteligencia artificial (IA) en actividades manuales repetitivas y análisis de datos estandarizados, permite que los funcionarios se dediquen a proyectos más complejos y estratégicos. Diversas son las posibilidades que el equipo de TI podrá implementar.
Como las fuerzas de trabajo están moviéndose en el escenario virtual, los centros de comando deben hacer lo mismo.
Al adoptar un centro de comando global, los gerentes pueden monitorear las operaciones desde cualquier lugar y los trabajadores pueden conectarse entre sí de forma remota.
La crisis del nuevo coronavirus ha venido impactando la realidad corporativa de organizaciones en todo el planeta y los gerentes necesitan adoptar estrategias de emergencia de la mano de la TI para asegurar la preservación y recuperación de sus organizaciones. La integración de estos cinco pasos para mantener la resiliencia de los negocios durante la crisis puede ser un gran diferencial.